El expresidente Álvaro Uribe expresa su preocupación sobre las reformas sociales propuestas por el Gobierno Nacional, alertando que podrían afectar la confianza y la productividad del país.
El expresidente Álvaro Uribe ha vuelto a pronunciarse en contra de las reformas sociales que actualmente se encuentran en trámite en el Congreso, argumentando que estas medidas podrían tener un impacto negativo en la confianza de los colombianos y en la percepción internacional del país.
En relación con la reforma a la salud, Uribe enfatiza su preocupación por lo que él denomina un «manejo politiquero». Advierte que la confianza, un componente esencial para el aumento de la productividad de un país, está en riesgo debido a la posible sustitución de un sistema mixto y solidario en salud por un complejo sistema estatal.
«Confianza es lo primero que requiere el aumento de productividad de un país. La confianza se pierde con la destrucción de un sistema mixto y solidario en salud y su sustitución por un complejo sistema estatal, con manejo politiquero», señaló Uribe.
Asimismo, critica la reforma laboral, argumentando que impactará negativamente a los empresarios, especialmente a los pequeños y medianos. Uribe sostiene que la confianza se erosiona con normas laborales que sustituyan la relación empleador-empleado por un sindicalismo de poder político, imponiendo cargas que afectarán a las pequeñas y medianas empresas y generando conflictos en cada nuevo empleo.
El líder del Centro Democrático asegura que las propuestas del Ejecutivo, en lugar de construir, buscan destruir. «La confianza se pierde con una reforma pensional que disminuye las reservas y afecta el ahorro privado. La confianza se pierde cuando el sector privado trabaja con dudas y temores. La confianza se pierde cuando se destruye en lugar de introducir ajustes constructivos», afirmó.
Después del receso legislativo, el Congreso retomará la discusión de las reformas a la salud, laboral y pensional a partir del 16 de febrero, generando expectativas y debates en torno a la dirección que tomarán estas propuestas en el futuro del país.
Confianza es lo primero que requiere el aumento de productividad de un país. La Confianza se pierde con la destrucción de un sistema mixto y solidario en salud y su sustitución por un complejo sistema estatal, con manejo politiquero. La Confianza se pierde con unas normas laborales que sustituyan la relación del empresario y del trabajador por un sindicalismo de poder político; que impongan unas cargas con las cuales no puedan pequeñas y medianas empresas; y, que propicien que cada nuevo empleo sea un pleito. La Confianza se pierde con una reforma pensional que disminuye las reservas y afecte el ahorro privado. La Confianza se pierde cuando el sector privado trabaja con dudas y temores. La Confianza se pierde cuando se destruye en lugar de introducir ajustes constructivos.
